Noticias
Te ponemos al día de nuestras novedades

Enfermedad de Parkinson y COVID-19
La enfermedad de Parkinson en sí misma, no es un factor de riesgo de hospitalización por COVID-19. No obstante, existen unas recomendaciones para pacientes con Parkinson y trastornos del movimiento.
- Las medidas de distanciamiento social han de cumplirse de manera estricta y cuidadosa.
- Los pacientes deben evitar o posponer la estancia hospitalaria por motivos que no sean de emergencia, dado que, lamentablemente, los hospitales pueden ser una fuente de infección adicional
- Las visitas de pacientes ambulatorios pueden ser sustituidas por las herramientas disponibles de telemedicina y solo deben realizarse cuando sea necesario el contacto directo
- Es posible que se requiera contacto directo con el paciente, sobre una base cuidadosamente considerada, según sea necesario y asegurando un equipo de protección personal adecuado. Por ejemplo:
- Para la terapia con toxina botulínica
- Para ajustar o verificar la programación de DBS, por falla de la batería de DBS o tratamientos de la bomba.
- La cuarentena puede evitar que los pacientes con Parkinson tengan un estilo de vida activo, que ya puede verse obstaculizado por afecciones preexistentes, como la falta de motivación, la discapacidad física y los problemas del estado de ánimo. Se pueden fomentar los juegos de ejercicios de realidad virtual o los instrumentos de ejercicio en el hogar.
- En caso de infección por COVID-19, el médico debe asegurar el mantenimiento de los medicamentos previos para la DP, especialmente las dosis adecuadas de l ‐dopa / DDCI, según lo recomendado para cualquier tipo de neumonía en pacientes parkinsonianos para evitar rigidez con contracturas y deterioro respiratorio con reducción de capacidad vital y flujo espiratorio máximo.
Más información sobre el servicio aquí.
28-04-2021Compartir: