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Tratamiento de lesiones con PRP

Tratamiento de lesiones con PRP

Qué es

El Plasma Rico en Plaquetas o PRP es un producto derivado de la sangre del propio paciente (autólogo) que tiene una concentración de plaquetas y otros elementos plasmáticos por encima de los valores normales. Las plaquetas liberan los factores de crecimiento y otras biomoléculas que son principios activos naturales responsables de la estimulación y aceleración de la cicatrización tisular local.

Sirve para tratar lesiones como tendinitis, bursitis, problemas en los ligamentos, desgarros y roturas musculares agudas, lesiones de pie como la fascitis plantar, problemas articulares, en cirugía (reconstrucción de ligamentos, tendones, etc.)

Cómo se obtiene

1. El personal de enfermería tomará una muestra de sangre anticoagulada del paciente.

2. Se coloca en el tubo donde se va a centrifugar la sangre.

3. Se centrifuga para separar los otros componentes de la sangre del Plasma Rico en Plaquetas que es lo que nos interesa en este tratamiento.

4. En la centrigugadora, se separan los componentes de la sangre y se selecciona la fracción que contiene la concentración más adecuada de plaquetas (la parte amarilla que podemos ver en la imagen).

5. El PRP se carga en una jeringuilla para poder ser infiltrado por la traumatóloga. 

6. La traumatóloga administra el PRP en la zona a tratar mediante una inyección con un protocolo específico.

 

Este procedimiento se realiza en consulta sin necesidad de quirófano.

 

Cuánto tiempo dura el tratamiento

Se recomienda realizar una o varias aplicaciones con la frecuencia determinada por el medico según situación clínica y otros criterios. Podemos realizar ciclos de 3 a 5 sesiones que, en caso de ser necesario, se repetiría pasados 6 meses. 

Resultados

  • Disminución de la inflamación y del dolor
  • Aceleración de la cicatrización de tejidos lesionados (tendones, cartílago, músculo…)
  • Aumento de movilidad y funcionalidad articular y muscular
  • Reducción del tiempo de recuperación

 

Efectos secundarios

No existe riesgo de rechazo pues se usa el propio plasma del paciente, y los únicos efectos secundarios están asociados a la aplicación, como pequeños hematomas o una leve molestia que puede durar algunos días. A medida que desaparezca el dolor y se vaya regenerando el tejido afectado, mejorará su funcuionalida y precisará menos mediación. además, el uso de PRP ha sido estudiado y probado clínicamente en diversas áreas de la medicina y en ni gún caso podría considerarse tratamiento experimental. 

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