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Vivir sin tabaco, tu mejor decisión
Los beneficios de dejar de fumar comienzan a notarse desde los primeros veinte minutos

Vivir sin tabaco, tu mejor decisión

El tabaquismo es una enfermedad crónica, no transmisible y adictiva. Un trastorno conductual en el que está disminuido el control sobre el consumo que se caracteriza por la necesidad o compulsión hacia la toma periódica o continuada.

Está declarado como un problema de salud pública ya que es la principal causa de muerte evitable de enfermedad muerte prematura en los países occidentales, causante de 6 millones de muertes anualmente en todo el mundo.  

Es la adicción al tabaco provocada, principalmente, por uno de sus componentes activos, la nicotina; la acción de dicha sustancia acaba condicionando el abuso de su consumo.

Debido a su vía de administración se convierte en una droga de acción inmediata, dotándola de un notable potencial de abuso. 

Componentes

Cada cigarro contiene más de 4.000 sustancias químicas donde, al menos, 250 son nocivas para la salud y más de 50 tienen efectos cancerígenos comprobados.

Cada cigarro produce 250 cc de humo aproximadamente, resultante de la combustión del tabaco, papel y aditivos.

A continuación se expone un dibujo explicativo sobre los componentes del tabaco.

 

Prevalencia

El tabaco es la primera causa de muerte prevenible en los países desarrollados y, en España, también la causa más importante de años de vida perdidos de forma prematura junto a años vividos con discapacidad.

España tiene una de las mayores tasas de prevalencia de la Comunidad Europea con un 27,1% de fumadores entre la población mayor de 16 años y apenas un 1% de reducción entre 2003 y 2007. En los países del este europeo hay más fumadores por lo que la prevalencia media en toda Europa es de 28,6% (40% de varones y 18,2% de mujeres).

El consumo de tabaco tiene una alta tasa de letalidad, más del 50% de los fumadores de larga evolución morirá por una enfermedad causada por el tabaco.

Más del 60% de los fumadores quiere dejar de fumar y ha realizado algún intento de abandono en el último año. Muchos de ellos recurren a manuales y otros no saben dónde buscar ayuda efectiva. A nuestras consultas acude cada año el 75% de las personas asignadas y la mayoría lo hace 5 o 6 veces. Aunque disponemos de poco tiempo en cada ocasión, tenemos muchas oportunidades para intervenir y herramientas terapéuticas farmacológicas y no farmacológicas de eficacia probada.

Por otro lado, la reciente aprobación de la Ley 42/2010 de 30 de diciembre de medidas sanitarias frente al tabaquismo y reguladora de la venta, el suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco, junto con el incremento del precio del tabaco en España, está aumentando la proporción de fumadores que solicitan ayuda para dejar de fumar o se encuentran en disposición de querer abandonar el consumo aunque no lo soliciten directamente.

Tabaco, ¿una droga?

El tabaquismo conlleva una triple dependencia: dependencia social, dependencia física o química (neuroadpatación producida por la administración repetida de tabaco) y la dependencia psicológica con la necesidad de continuar fumando para evitar el síndrome originado por su deprivación.

Consecuencias y enfermedades asociadas

  • Efectos psicológicos: Relajación, sensación de mayor concentración
  • Efectos fisiológicos: disminución de la capacidad pulmonar, fatiga prematura, disminución de los sentidos del gusto y olfato, envejecimiento prematuro de la piel, mal aliento, color amarillento de dedos y dientes, tos y expectoración matutina.
  • A corto plazo: aumento de catarros de repetición, aumento de la tos, disminución del rendimiento deportivo, pérdida de apetito, arrugas prematuras.
  • A largo plazo: enfisema pulmonar, bronquitis crónica cáncer de pulmón, hipertensión arterial, enfermedad coronaria (angina, infarto agudo de miocardio), accidentes cerebrovacsulares, úlceras gastrointestinales, artritis crónica, cáncer bucofaríngeo, cáncer renal o de vías urinarias, impotencia sexual.

 BENEFICIOS DE DEJAR DE FUMAR

 A continuación se exponen los beneficios en la salud al dejar de fumar desde los primeros 20 minutos hasta los 10 años.

Recompensas inmediatas al dejar de fumar 

•Mejor aliento

•Dientes más blancos

•Desaparición del olor a humo de ropa y cabello

•Desaparición del color amarillos de uñas y dedos

•Mejoría del olfato y gusto

•Impacto económico

•Aceptación social

•Salud para los demás: evitar fumadores pasivos

Diagnóstico en la consulta: Estudio de la dependencia y valoración de la motivación

Una vez que un paciente llega a consulta con la intención de dejar de fumar, se realizará una anamnesis completa así como exploración física por órganos y sentidos. A su vez pruebas diagnósticas para descartar enfermedades crónicas producidas por el tabaco.

Estudio de la dependencia

El tabaquismo es una drogodependencia. La nicotina es la responsable de generar:

--Dependencia física y tolerancia, de manera que al suspender el consumo de cigarrillos aparece el síndrome de abstinencia. Pero en el mantenimiento del hábito tabáquico están implicadas otras variables psicológicas, sociales y conductuales que son responsables de la dependencia psico-social y conductual. La importancia de conocer estos factores está dirigida a poder aplicar el tipo de tratamiento más correcto para cada fumador que quiera dejar el tabaco. 

--Exploración física general.

--Estado de conjuntivas, mucosa nasofaríngea, dientes y uñas.

--Presión arterial y pulso

--Peso, talla. IMC

--Auscultación cardiorrespiratoria

•Dependencia física

Existen varias herramientas para medir la dependencia física. Una de las más utilizadas es el test de Fagerström para la dependencia de nicotina FTND que es una versión simplificada del test de Fagerström para la tolerancia FTQ. Se trata de un test que consta de 6 preguntas que deben ser contestadas por el fumador. Cada respuesta lleva consigo una puntuación que al final debe sumarse, obteniéndose una puntuación total que permite clasificar la dependencia del fumador en: dependencia leve, moderada o alta.

Este test nos permite además de ofrecer el mejor tipo de tratamiento en función del resultado obtenido, valorar el riesgo de desarrollar determinados tipos de enfermedades asociadas al consumo de tabaco.

•Dependencia social y conductual

La dependencia psíquica y social se debe a la conexión repetida de situaciones de la vida cotidiana con el acto de fumar un cigarrillo. Este tipo de situaciones pueden llevar consigo alguna carga afectiva, nerviosismo, tranquilidad etc. o bien una carga gestual como encender un cigarrillo cada vez que se descuelga el teléfono o trabaja con un ordenador, o bien una situación social como salir con los amigos o tomarse un café.

Esta dependencia puede ser valorada mediante el test de Glover Nilsson. Es un cuestionario que va a darnos información sobre cómo se comporta el fumador. La versión más reciente del cuestionario consta de 11 preguntas y permite clasificar la dependencia psicológicaen:

• Dependencia leve: Puntuación de 0 a 11.

• Dependencia moderada: Puntuación de 12 a 22.

• Dependencia fuerte: puntuación de 23 a 33

• Dependencia muy fuerte: puntuación de 34 a 44.

•Test de recompensa

El objetivo de este test es averiguar cuáles son las razones fundamentales por las que el fumador consume tabaco. Combinado con el test de Fagerström tiene implicaciones terapéuticas interesantes:

Recompensa positiva: los fumadores responden a la opción A

Recompensa negativa: los fumadores responden a la opción B

4. Valoración de la motivación

La motivación para dejar de fumar es una de las variables básicas a conocer en todo intento de abandono. Si el fumador no tiene la suficiente motivación el fracaso será muy probable. Se pueden analizar cuáles son las razones que el fumador tiene para dejar de fumar. El comentar sus motivaciones e intentar mejorarlas es uno de los aspectos de la entrevista motivacional. En ocasiones se recomienda que los fumadores escriban una lista de motivos para dejar de fumar y las coloquen en determinados sitios estratégicos donde habitualmente fuman. Para conocer la motivación del fumador se suele utilizar el test de Richmond, que consiste en cuatro preguntas que valoran el grado de motivación

para dejar de fumar en una escala de 1 a 10 puntos. Permite clasificar la motivación en: baja, moderada o alta. Para incluir al fumador en un programa de deshabituación tabáquica, con ciertas expectativas de éxito, es necesario que la puntuación del test sea de 9 a 10 puntos. También podemos utilizar el test de Michael-Fiore para conocer la probabilidad de éxito en la deshabituación tabáquica.

5. Estudio de la fase de abandono

Dejar de fumar es un proceso con diferentes cambios de conducta a lo largo de la vida del fumador. Estos cambios de conducta no ocurren de forma repentina sino que son graduales y progresivos en el tiempo.

Las fases de abandono descritas por Prochaska y DiClemente son las siguientes:

• Fase de precontemplación: los fumadores no tienen intención de cambiar su hábito de fumar en los próximos 6 meses. Se estima que un 30% de los fumadores están en dicha fase y en ella los fumadores no quieren conocer los efectos nocivos del cigarrillo. Se trata de fumadores consonantes.

• Fase de contemplación: los fumadores están pensando seriamente en dejar de serlo en los próximos seis meses. Se trata de fumadores que han intentado dejar de fumar en varias ocasiones, pero no lo han conseguido o han pasado graves dificultades en la deshabituación. La mitad de los fumadores está en esta fase. Las ventajas y desventajas del cigarrillo son ponderadas por igual por el fumador.

• Fase de preparación: los fumadores se plantean abandonar el consumo de cigarrillos en el próximo mes. Las ventajas de dejar de fumar sobrepasan claramente a las desventajas de intentarlo; aproximadamente el 15% de los fumadores se encuentran en esta fase. Son fumadores disonantes.

• Fase de acción: se trata de exfumadores de menos de seis meses de evolución. En esta fase son frecuentes las recaídas.

• Fase de mantenimiento: son exfumadores de más de seis meses de evolución. El riesgo de recaídas es menor que en la fase de acción. Se puede diagnosticar la fase dentro del proceso de abandono del hábito tabáquico en la que se encuentra el fumador en muy poco tiempo mediante unas sencillas preguntas. La actuación terapéutica debería ser distinta en función de la fase en la que se encuentre el fumador y debe ser dirigida a favorecer la progresión de una fase a otra hasta conseguir la abstinencia.

Valoración del síndrome de abstinencia

Al dejar el tabaco el fumador sufre habitualmente y en diferente grado una serie de síntomas que constituyen el síndrome de abstinencia. Estos síntomas y signos pueden ser tanto físicos como psicológicos. La intensidad del síndrome de abstinencia decrece a lo largo del seguimiento en los sujetos que finalizan con éxito el tratamiento.

El síndrome de abstinencia es una de las principales causas de recaída durante el proceso de abandono del tabaco, por lo tanto es importante conocerlo y valorarlo durante las primeras semanas de deshabituación. Existen varios cuestionarios para valorar la intensidad del síndrome de abstinencia. 

•Cambios del estado de ánimo: Irritabilidad, ansiedad, depresión, hostilidad, impaciencia.

•Sintomas fisiológicos: Impulso de fumar, hormigueos en extremidades, molestias gástricas, somnolencia, dificultad de concentración inquietud, fatiga, hambre, aumento de peso, disminución de la frecuencia cardiaca, disminución del rendimiento, trastorno del sueño, estreñimiento.

Diagnóstico del grado de tabaquismo 

Podemos clasificar en grado del tabaquismo con los siguientes datos: consumo de tabaco y monóxido de carbono en aire espirado.

La importancia de estas clasificaciones, una vez más, radica en aplicar el tratamiento y estrategias más adecuados para cada fumador en cada momento.

Terapias de deshabituación tabáquica

1.INTERVENCIONES PSICOLÓGICAS: Técnicas de apoyo psicológico, técnicas conductuales cognitivas, entrenamiento en habilidades de afrontamiento, control de estímulos, prevención de la respuesta, programas psicológicos conductuales multicompetentes.

2.INTERVENCIONES MÉDICAS --> FARMACOLÓGICAS: el médico se encarga de investigar, registrar e informar los riesgos de consumo del tabaco e iniciar terapia de deshabituación mediante terapia de reemplazo de nicotina: parches, chicles, inhaladores, fármacos con contenido en nicotina.

3.OTRAS INTERVENCIONES.

Tasas de éxito para dejar de fumar

Sólo aproximadamente del 4-7% de las personas pueden dejar de fumar en cualquier intento sin ningún medicamento u otra ayuda. Alrededor del 25% de los fumadores que usan medicamentos pueden mantenerse sin fumar por más de 6 meses. 

 

Marta Castro | Servicio de Neumología HSR Las Palmas

 

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