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Deformidades del pie
Los conocidos juanetes (cuyo nombre científico es hallux valgus) es una de las anomalías más comunes del pie. Sucede cuando el primer dedo se desvía hacia el interior, llegando incluso a superponerse con el segundo. En estos casos, la cirugía es la única manera de atajar el problema.
Los pacientes entran a quirófano con una anestesia regional, general o raquídea. El especialista puede proceder siguiendo diferentes procedimientos, en función de la situación de la deformidad y de los problemas derivados que deban tratarse. La operación suele tardar unos 40 minutos.
En la actualidad, la técnica más común es la osteotomía metatarsiana distal en V invertida, un método que permite seccionar la cabeza del hueso metatarsiano, uno de los que forman la estructura del esqueleto en el pie. Sin embargo, la corrección no siempre es completa y cabe la posibilidad de la aparición de un nuevo juanete, especialmente si se continúa empleando un calzado que deforme el pie.
Por otro lado, además de la cirugía existen tratamientos no quirúrgicos que, si bien no ofrecen una solución definitiva, sí mejoran de manera considerable la incidencia de la deformidad. En este sentido, la utilización de antiinflamatorios y analgésicos, así como la realización de sesiones de fisioterapia y la aplicación de calor y frío en la zona local permite disminuir los síntomas. Igualmente, es fundamental que el paciente utilice zapatos planos de puntera ancha.